Cap. 59 El perdón y la tolerancia
El agua brumosa saturó la habitación, mientras Ling Xiao se empapaba en un charco de agua, mirando fijamente a la placa de comando que yacía en tierra.
El Emperador realmente lo estaba dejando ir ...
Se sentía tan increíble. Había usado la excusa de querer tomar un baño para escapar de la bodega del Emperador.
Luego fue llevado al baño por el chambelán que estaba al lado del Emperador.
Ling Xiao suspiró suavemente y movió un poco la placa de comando.
Tener esto significa que ya no tendrá que estar tan asustado o estar siempre nervioso en el palacio. Tampoco temblará de miedo todo el tiempo delante del Emperador.
Aunque él dice eso, ¿era realmente posible?
Ling Xiao continuó contemplando mientras miraba la placa de comando. Un destello de luz atravesó sus ojos y frunció los labios, sosteniéndolos con fuerza en sus manos.
Quizás él pueda probarlo.
“¿Joven maestro?” Una llamada para él entró por la puerta.
Ling Xiao volvió a sus sentidos y respondió a la llamada de afuera, "¿Qué es?"
"El Emperador te está esperando".
Ling Xiao se sorprendió y luego notó que había estado en el baño durante bastante tiempo. El Emperador probablemente se impacientó y alguien vino a buscarlo.
Con esos pensamientos, Ling Xiao se puso de pie y se puso la ropa blanca ajustada que el chambelán le mostró. Luego siguió al hombre a la habitación del Emperador.
La mesa estaba cubierta de varios platos, demostrando que era hora de que el Emperador comiera. Ya estaba sentado en la mesa.
Sin embargo, el tazón y los palillos frente al Emperador aún no se habían movido, asegurando claramente a Ling Xiao que el Emperador aún no había comido.
Ling Xiao caminó una y otra vez por costumbre, saludó al Emperador una vez y planeó servir al Emperador mientras comía.
Pero el Emperador interrumpió la acción de Ling Xiao y usó sus ojos para decirle que se sentara.
Al detenerse por un momento, Ling Xiao recordó que ya no era el Mayordomo Ling que servía al Emperador.
Escondió sus pensamientos y obedientemente se sentó junto al Emperador, quien luego comenzó a levantar su tazón y palillos.
Ling Xiao estaba aturdido, el Emperador ... ¿estaba esperando que comieran juntos?
Parpadeó, se lamió los labios y desechó esos pensamientos, siguiendo de manera nerviosa la acción del Emperador para tomar también su propio tazón y palillos.
Pero su corazón estaba muy nervioso.
La apariencia inquieta de Ling Xiao fue observada por el Emperador cuando lo miró. Luego preguntó con calma: "¿No estás acostumbrado?"
Ling Xiao se detuvo, dejó su tazón y palillos ligeramente y honestamente asintió con la cabeza.
Esta no era solo la primera vez que comía con el Emperador, sino que también era la primera vez que alguien esperaba que comiera juntos desde que vino a este mundo. Causa un calor que no había sentido en mucho tiempo para reaparecer en él.
Fue así desde que vino a este mundo. En su vida pasada, ayudó a Mo Qi a planear y a llevar a cavo los planes, mientras que en esta vida, él estaba ocupado vengando. Todo el camino fue como caminar sobre el hielo .
En el pasado, cuando ayudaba a Mo Qi, siempre estaba solo, mientras que en esta vida cuando trataba de vengarse, siempre estaba solo. Casi había olvidado lo normal y reconfortante que es comer una comida con otra persona.
Ling Xiao de repente sintió que sus ojos se agriaron un poco, así que bajó la cabeza para ocultar su rostro. No quería que el Emperador lo viera. Poco a poco, dijo con voz tranquila y sueva: "Esta es la primera vez que Ling Xiao ... come junto a Su Majestad".
El miedo en el rostro del pequeño eunuco fue quitado, y lo que lo reemplazó fue una expresión emocionalmente conmovida. Bajo su cara arrugada, su corazón se agitó y los bordes de sus ojos se enrojecieron. Las lágrimas brillantes, que surgieron a continuación, amenazaron con caer en cualquier momento, haciendo que los corazones de quienes lo vieron se ablandaran.
El Emperador suspiró suavemente, luego extendió la mano y recogió algunos platos con sus palillos para Ling Xiao. Sin prisas, le dijo: "Habrá muchas oportunidades para que comamos juntos de aquí en adelante. Deberías acostumbrarte rápidamente a esto ".
El tono del Emperador era abrumador como siempre, pero cuando Ling Xiao lo escuchó, se sintió muy familiar y se rió en voz baja: "Su Majestad tiene que lidiar con mucho trabajo gubernamental todo el tiempo, ¿cómo podría acompañar siempre a Ling Xiao por una comida?"
Ling Xiao sabía que la forma en que hablaba preguntaba indirectamente sobre los planes del Emperador. Sabiendo que era algo que el Emperador siempre odiaba, Ling Xiao todavía lo hacía para sentirlo un poco. Quería saber qué tan bajo estaba el límite del Emperador para aguantarlo.
Había cometido muchas cosas equivocadas, pero el Emperador podía tolerarlo.
Entonces, ¿la forma descarada en la que estaba hablando también sería tratada como buena?
El Emperador le dio una mirada de reojo a Ling Xiao. Fue muy incisivo ya que sintió que podía ver su corazón a fondo y entender todo lo que Ling Xiao estaba pensando. Sorprendido, Ling Xiao estaba a punto de levantarse y pedir perdón cuando el Emperador respondió con calma: "Si eso es lo que deseas, entonces una vez que regresemos al país Mu, siempre comeremos juntos".
La inesperada respuesta hizo que Ling Xiao se silenciara mientras miraba hacia abajo.
El Emperador realmente podría tolerarlo ...
Como él podía tolerarlo ...
Ling Xiao pensó un poco, luego reunió su coraje y preguntó: "Su Majestad, ¿por qué deja que Ling Xiao se vaya?"
Esto era algo que siempre lo había dejado perplejo. El Emperador no era un rey soberano que siempre toleraría a alguien solo porque le tenía cariño.
Tenía sus propios principios y reglas. Las cosas que Ling Xiao había hecho antes habían tocado claramente la línea de fondo del Emperador, pero este último todavía no lo reprendió.
Ling Xiao estaba realmente desconcertado.
El Emperador escuchó esto y sus manos se detuvieron, su vista se movió hacia Ling Xiao.
A pesar de que Ling Xiao ahora estaba frente a los ojos del Emperador, que parecía como si supieran todo, y la imponencia del Emperador, él solo apretó los dientes, tranquilizándolo con calma.
Su apariencia firme, que estaba llena de determinación para saber por qué, aunque también contenía huellas de súplica, parecía pedirle al Emperador que le contara todo.
El Emperador suspiró una vez en su corazón al verlo, y finalmente respondió: "Eres especial en Nuestro corazón".
Aunque el Emperador lo dijo con calma, el corazón de Ling Xiao saltó y su rostro se puso caliente. Alejó su mirada con pánico y dijo en voz baja: "Su Majestad, pero Ling Xiao le había mentido ..."
“¿Mentido?” El Emperador dejó su tazón y palillos, sintiendo que estaba por debajo de su dignidad mientras giraba la cabeza y miraba con desdén a Ling Xiao, “¿Pensaste que podías mentirnos?”
Hablando hasta este punto, el Emperador hizo una pausa y recordó algo, su apariencia se volvió un tanto antinatural cuando su vista se movió hacia la entrepierna de Ling Xiao, "... Realmente hubo una cosa que logró ocultarse de Nosotros".
"..." Ling Xiao se puso rígido de la vista candente del Emperador en su cuerpo y instintivamente retiró sus piernas.
El Emperador apartó los ojos ante su acción: "Pero no lo odiamos".
El corazón de Ling Xiao se estremeció y bajó la cabeza.
Ling Xiao finalmente entendió. El Emperador lo sabía todo y todos los asuntos estaban a su alcance. Es por eso que, a pesar de que le había mentido al Emperador antes, y como el Emperador no se oponía a su pequeño asunto, podía ser excusado. Además, el emperador le tenía cariño, así que decidió disculparlo.
La conclusión del Emperador era realmente mucho más baja para él. Ya que era así, un rastro de astucia revoloteaba en sus ojos. Apretó los dientes y una vez más reunió su coraje para preguntar: "Su Majestad, ¿puede perdonar a Fu Yujun?"
Comentarios
Publicar un comentario